Jabón champú
Nuestro champú sólido está formulado únicamente a base de jabón, sin tensioactivos, y por ello es la manera más natural y efectiva de limpiar el cabello.
Con el cabello húmedo, coge el jabón y frótalo entre las manos, o directamente sobre el pelo, hasta conseguir espuma. Posteriormente distribuye bien la espuma generada por todo el cabello y masajea el cuero cabelludo durante unos minutos. Insiste sobre las zonas más sucias. Para una limpieza más profunda, aclara con agua y repite el proceso.
No te preocupes si durante los primeros lavados el pelo no queda como esperabas. El proceso de adaptación del cabello puede tardar unas semanas en regularse, ya que al eliminar los sulfatos y siliconas, el cuero cabelludo produce más grasa para compensarlo. Si quieres que tu cabello luzca más brillante y suave, añade un buen chorro de vinagre al último lavado.
Limpieza corporal: jabón de baño
Una pastilla de jabón Essabó es el producto más natural para la limpieza e higiene corporal. Produce una abundante y cremosa espuma que limpia, nutre y cuida la salud de nuestra piel. A su vez, no genera irritaciones provocadas por el contacto directo de ingredientes sintéticos habituales en geles.
Humedece la pastilla y aplica directamente sobre la piel o sobre la esponja. Masajea la espuma por el cuerpo y posteriormente enjuaga bien con agua.
Limpieza facial: jabón desmaquillante
Los jabones Essabó limpian en profundidad todo tipo de pieles de la manera más cómoda y saludable, eliminando las impurezas e incluso el maquillaje.
Frota la pastilla de jabón entre las manos hasta generar espuma. Posteriormente, con los ojos bien cerrados, masajea el rostro con la espuma durante unos segundos antes de aclarar con abundante agua. Utiliza una esponja desmaquillante reutilizable, ecológica recomendablemente, para eliminar los restos de maquillaje. Finaliza el proceso con tu habitual tónico y/o crema hidratante.
Limpieza de manos: jabón desinfecctante
Una correcta higiene de manos es imprescindible para prevenir cualquier infección y/o contagio. El jabón tradicional de “toda la vida” es el producto más eficaz y natural para eliminar la suciedad a la vez que cuida la piel y las manos más delicadas.
Humedece tus manos con agua, frota el jabón entre las manos hasta conseguir abundante espuma. Frota las palmas de las manos entre sí con los dedos entrelazados. Finalmente enjuaga las manos con agua hasta hacer desaparecer por completo la espuma.
